Malaga CF

Samu Castillejo, el as en la manga

Juan Solla felicita a Juanmi, que se abraza con Samu Castillejo tras el 2-1, cerca del banquillo.
Juan Solla felicita a Juanmi, que se abraza con Samu Castillejo tras el 2-1, cerca del banquillo. / Carlos Moret
  • La frescura del canterano, que reclama plaza de titular, vuelve a dar vida al Málaga

El Málaga remontó a la heroica, en inferioridad numérica, después de salir casi con un gol en contra del vestuario al inicio del partido, sin empezar a sudar, y en el momento en que menos se esperaba la reacción del equipo. Lo hizo apoyado en algún protagonista inesperado, sobre todo Samu Castillejo, un jugador cuya cotización sube como la espuma al mismo tiempo que baja la de algunos compañeros, como Amrabat, que fue suplido por el canterano y que no encuentra su sitio en el dibujo.

La afición de La Rosaleda puede haber encontrado un ídolo inesperado en el segundo Samu de la plantilla. Castillejo, ‘Casti’ para el vestuario, se ha especializado en dinamitar los partidos con su salida al campo en el último tercio de los mismos. Su cambio de ritmo, su tremenda zancada y ese físico liviano, que parece que le hace levitar sobre el campo, destrozó a la defensa del Granada en los veinte minutos finales.

Samu Castillejo protagonizó la acción clave del choque, en una internada con desborde y cuyo centro repelió con las manos Iturra. A instancias del asistente, Velasco Carballo pitó penalti después de segundos de vacilación. Antunes asumió la responsabilidad y ajustó el disparo, pero el mérito previo fue del extremo malagueño, que ya había pasado a jugar por la derecha con la expulsión de Angeleri y la marcha del campo de Horta.

Un jugador eléctrico

Por un costado o por otro, el juego de Samu Castillejo es eléctrico y acaba pasando factura a sus rivales ya con el desgaste del partido. El máximo goleador la pasada campaña en el Atlético Malagueño se encontró este verano con la grata sorpresa de hacer la pretemporada con la primera plantilla, y casi desde el primer día sus cualidades agradaron mucho a Javi Gracia, que probó con él como titular en el once base con el que ensayó en varios de los partidos veraniegos.

Finalmente no fue titular en la primera jornada, pero debutó en Mestalla, donde dejó sus primeros grandes destalles. Su peor recuerdo es el del partido del Levante, cuando malogró una ocasión en la última acción del choque, pero cuajó un gran partido desde el once inicial ante el Barcelona. Lejos de importarle no haber viajado a Getafe, anoche se destapó con otra gran actuación. Comenzó en la izquierda y acabó en su banda menos natural, la derecha. Zurdo cerrado, es capaz de perfilarse para el disparo desde cualquiera de los costados, como en el lanzamiento fallido de rosca que intentó justo después del 2-1.

Samu Castillejo, pese a no marcar fue el desatascador. No pudo serlo Amrabat, que no se parece al de la temporada anterior. El técnico sigue sin encontrar una posición ideal para el holandés y lo está probando en distintas zonas del ataque. Ayer fue segundo punta, pero ese rol no parece favorecer al máximo sus virtudes cuando los rivales están claramente replegados, como se planteó el choque de anoche. Sin muchas posibilidades de correr o de desmarcarse por detrás de la defensa rojiblanca, tuvo que jugar demasiadas veces de espaldas a la portería, para proteger con su cuerpo y buscar el giro o el cambio de ritmo.

Pareció un jugador infrautilizado en relación al pasado curso e igual de lejos de las opciones realizadoras, y a todo esto se le suma un cierto desquiciamiento exigiendo de los arbitrajes decisiones disciplinarias más duras con los rivales. Por tanto, el debate en el ataque del Málaga se mantiene: ¿Ha hecho méritos Samu Castillejo ya para ser titular o causa más daño como revulsivo en los partidos? ¿Ha de seguir jugando Amrabat por dentro?