Malaga CF

Juanpi: «Yo quería tener continuidad, y está claro que el míster no me la iba a regalar»

El centrocampista del Málaga Juanpi, ayer en el estadio de atletismo.
El centrocampista del Málaga Juanpi, ayer en el estadio de atletismo. / Francis Silva
  • «Tenemos que seguir en la línea en la que estamos sin pensar en otras cosas», afirma el jugador del Málaga

A sus 22 años recién cumplidos (nació en Caracas el 24 de enero de 1994), Juan Pablo Añor, ‘Juanpi’, lleva ya siete en el Málaga. Tras destacar en el filial, pasó al primer equipo, donde cumple su segunda temporada. Se expresa sin dudar y muestra una sabrosa mezcla entre el acento de su país y el deje malagueño. Es el jugador de moda en el conjunto blanquiazul, en el que empieza a aparecer en las fotos de comienzos de los partidos. En Eibar fue el autor del gol que abrió el marcador, aunque en su destacada actuación hubo una nota negativa: la ocasión que falló a puerta vacía en el minuto 90. Menos mal que Santa Cruz salió en su auxilio y anotó el 0-2. «Cuando fallé, me dije: ‘La que se me viene encima si empatamos el partido», recuerda con naturalidad.

–¿Cuál fue el primer mensaje o llamada que recibió tras el partido con el Eibar para felicitarlo por su gol?

–Recibí bastantes llamadas y mensajes de felicitación de amigos y familiares. No lo recuerdo exactamente, pero uno de los primeros fue mi padre, y también mi representante (Juan Mata). La verdad es que abrir el teléfono y ver tantos mensajes y llamadas pendientes es muy gratificante.

–En el otro lado de la balanza está el gol que falló. Sabemos quién fue el primero que lo consoló, nada menos que el árbitro, Mateu Lahoz. ¿Qué le dijo exactamente?

–Cuando chuto, enseguida sé que el balón va fuera y me tapo la cabeza con la camiseta y hago un gesto muy elocuente. Entonces viene hacia mí y me dice: «Tranquilo, que va a ser la primera y la última que vas a fallar así». Y la verdad es que se agradece un gesto así. A Mateu todos lo conocemos. Nos pregunta por cosas personales y se interesa mucho por los jugadores, y eso es un buen detalle. Me cae bien, porque es muy cercano con el jugador.

–¿Qué pensó en ese minuto 90?

–Me dije: «La que se me viene encima si empatamos el partido» (el marcador era de 0-1 en ese momento). Yo pensé en matar el partido con el 0-2, pero confié en mi primer toque desde lejos y le pegué mal en lugar de haber controlado el balón y conducirlo un poco.

–Cuando marcó Santa Cruz sentiría un gran alivio, ¿no?

–Pues sí, Roque me salvó, porque aunque al final marcó el Eibar el gol de él sentenció.

–Perdone que insista en ese error, pero creo que se debió a su condición de zurdo cerrado.

–Sí, como he dicho, tenía que haber controlado el balón y haberle pegado con la derecha, pero tenía plena confianza en marcar. Al final me apresuré quizás por las ganas de querer matar el partido. Pero yo lo vi fácil.

–Pasemos a lo bueno, a su golazo, con una oportuna aparición en el área pequeña. ¿Cuando abrió usted el marcador pensó que el partido estaba ganado?

–No, en absoluto. Marqué al final de la primera parte, pero sabemos que el Eibar es un gran equipo, y sobre todo en su campo. Solo habían ganado allí el Madrid y el Atlético, por lo que mantener el resultado en la segunda parte no iba a ser fácil.

–Con la permanencia a tiro de cuatro victorias, ¿se piensa ya en otras metas?

–No, creo que el equipo está muy concienciado de lo que tiene que hacer. Si nos ponemos a pensar como el año pasado, nos equivocaríamos. Tenemos que seguir en la línea en la que estamos sin pensar en otras cosas. Si llega la opción de pensar en algo mejor será fruto del trabajo, por lo que no tenemos que pensar en nuevas expectativas, sino en la misma idea que tenemos ahora. Con ese pensamiento hasta final de temporada podemos hacer cosas grandes.

–¿Cuál fue la clave de la victoria en el campo del Eibar?

–Preparamos muy bien el partido y sabíamos cómo teníamos que jugar en ese campo. Vimos bastantes vídeos del Eibar, y teníamos el ejemplo del año pasado. Sabíamos que había que entrar en el partido desde el primer minuto. Sabíamos que era un partido de muchas segundas jugadas, de poco juego en medio campo, y el césped tampoco era el ideal para jugar al toque. Supimos meternos en el partido y gracias a eso le pasamos por encima al Eibar en su campo.

–Es zurdo, pero juega en la derecha en muchas ocasiones. ¿En qué posición se encuentra más cómodo?

–Mi posición es detrás del punta, por delante de los medios centro. Me gusta jugar entre líneas y buscarles las espaldas a los medios centro rivales. Pero el míster me da la libertad de jugar por la banda y ayudar también a los medios centro a tener la posesión, y me estoy adaptando a esa posición. Requiere un poco más de sacrificio para defender y ayudar a mi lateral, pero me siento cómodo jugando a pierna cambiada.

–Supongo que se habrá propuesto no perder el sitio, ahora que pasa por un buen momento.

–Eso me lo propuse hace mucho tiempo. Siempre he querido buscar esta continuidad, tener minutos, sobre todo para tener soltura en el campo y confianza como la que tengo ahora. Por suerte he marcado goles y eso también ayuda. Yo quería tener continuidad y está claro que no me la iba a ganar porque sí, ni el míster me la iba a regalar. Desde el primer día que llegué aquí he trabajado al máximo para llegar a esto, y aprovechar las oportunidades que me dan.

–¿Le ha dicho Gracia algo al respecto de su nueva situación?

–Como siempre, me ha animado a seguir y a seguir, para que no me relaje y aporte cosas al equipo.

–¿No peca a veces de suficiencia o exceso de confianza?

–Es cierto que confío bastantes en mis posibilidades, y a veces puedo transmitir esa imagen de exceso de confianza o relajación, pero no es algo premeditado, aunque sí tengo que mirarlo. Necesito más concentración en muchas fases del juego.

–¿Es el niño mimado de la plantilla?

–No creo que lo sea, pero no sabría cómo responder a esta pregunta.

–¿Está contento por cómo se ha reforzado el equipo este invierno?

–Sí, claro. A la presencia de Chory Castro se une Uche, otro jugador con bastante experiencia en la Liga. Va a ser un buen refuerzo, y Atsu, que es muy rápido y nos va a dar esa velocidad que no teníamos. Otra buena incorporación es Cifu.

–Con Chory Castro se asoció muy bien en el 0-1 contra el Eibar.

–Chory Castro ha aportado mucho al equipo y nos da dado esa profundidad que habíamos perdido por la lesión de Juan Carlos, pero ahora lo vamos a perder un mes por lesión.

–¿Es bueno para un equipo que se vayan cinco jugadores y entren otros cinco en un mes?

–Está claro que no es bueno que se vayan jugadores, pero aquí siempre ha pasado eso. La suerte es que los que vienen suelen dar la talla.

–¿Por qué se le dan tan bien al Málaga los equipos ‘grandes’?

–Exactamente no lo sé, pero la realidad es que competimos. Sabemos jugarles de una manera que otros no saben. Preparamos bien el partido durante la semana. Creemos en el esquema que vamos a desarrollar y confiamos en sacar algo.

–Al Sevilla y al Barcelona se lo pusieron muy difícil.

–Contra el Barcelona merecimos más aún que ante el Sevilla, porque tuvimos más ocasiones.

–¿Echa de menos a Samu Castillejo, su inseparable amigo y excompañero en el Málaga?

–Sí, por supuesto, tanto a Samu como a su familia los recuerdo. Estábamos todo el día juntos, y claro que se le echa de menos tanto en el equipo como en la vida diaria.

–¿Cada cuánto tiempo habla con él?

–Todos los días, sobre todo por ‘whatsapp’, y cuando tenemos días libres hablamos a ver cómo nos podemos ver.

–Como a él, a usted le gusta regatear, como puso de manifiesto en una jugada contra el Eibar en la que se fue de tres rivales y terminaron haciéndole falta.

–Sí, me gusta encarar. Recuerdo la jugada, y en ella habíamos recuperado el balón y conduzco para tratar de ver una línea de pase, pero decido seguir hasta que me hacen falta.

–¿‘Chupa’ mucho en los entrenamientos?

–En los entrenamientos trato de probar cosas, pero me gusta más regatear en los partidos que en los entrenamientos.

–Una de sus especialidades es también el lanzamiento de faltas. ¿Ensaya mucho?

–Sí, ensayo con Duda y Recio.

–¿Los reta en los entrenamientos?

–Sí, competimos a ver quién marca más, pero el que sale ganando siempre es Duda. Trato de fijarme en su golpeo.

–¿Los zurdos tienen más magia que los diestros?

–No creo. Hay menos zurdos que diestros y quizás llamen más la atención cuando destacan, pero hay diestros con mucha magia.

–¿Quién tiene más magia en el fútbol actual?

–Neymar. No hay nadie que tenga ese estilo de juego, su magia, el espectáculo que ofrece, el regate y la velocidad.

–¿Se revuelve cuando le dan muchas patadas o se la devuelve más tarde al que se pasa de rosca?

–No, ni lo uno ni lo otro. No soy nada rencoroso.

–¿Qué es lo que menos le gusta del fútbol?

–Como jugador uno sabe a lo que se expone. Cuando te va bien llega la fama y si no, lo contrario. No me gusta lo que la gente opina equivocadamente de este mundo. Hay gente que habla y dice cosas que no tienen nada que ver con nuestra realidad.

–¿Es la Liga española la mejor del mundo?

–Sí, porque tiene a los mejores jugadores del mundo. Tiene a los dos mejores equipos del mundo. Es la Liga más vista, aunque quizás no la más competitiva.

–El viernes tienen un partido contra un rival que suele atragantársele al Málaga. ¿Qué hay que hacer para ganarle al Getafe?

–Siempre es complicado, y sobre todo allí. Hay que entrar en el partido desde el principio y estar todo el tiempo concentrado para llevarnos los tres puntos.