Malaga CF

Horta se reivindica con dos goles

Duda, durante el partido
Duda, durante el partido / Salvador Salas
  • El Málaga derrota a un Dinamo de Kiev de Champions que apenas le generó ocasiones de gol

La afición del Málaga y los medios de comunicación locales aprendieron ayer cómo se escribe Málaga en caracteres cirílicos, y también algunas expresiones en ucraniano. El club concertó un partido con el Dinamo de Kiev, pero al cuerpo técnico le gusta más revestirlo todo de simple entrenamiento, por lo que dispuso que se jugara a puerta cerrada. Como suele ser habitual en estas citas, jugaron los menos habituales en la Liga y algunos canteranos y, para ser consecuente con esa idea, portaron las camisetas color flúor de los entrenos, no las de competición.

Lo que no fue tan coherente es que se cerraran las puertas una vez que se conocía que el Dinamo iba a difundir el choque en ‘streaming’ en su propio canal de Youtube, de manera que muchos aficionados tuvieron que conformarse con esta opción, cuando era una buena oportunidad de animar a los suyos y de conocer a los nuevos fichajes.

El duelo permitió ver a Cifu, Ricca y Uche, que salió en la segunda mitad. Los laterales cumplieron, sin demasiada proyección ofensiva. Cifu tuvo delante al peligroso internacional paraguayo Derlis González, por lo que se contuvo. Ricca, correcto, apenas pasó por apuros, ante un rival que dentro de dos semanas retoma la competición, nada menos que en la ida de los octavos de final de la Champions y recibiendo al Manchester City.

El Dinamo de Kiev, igualado a puntos con el líder (el Shahktar Donetsk) antes del ‘parón’ en la Liga ucraniana (fue a comienzos de diciembre), retoma este torneo en el primer fin de semana de marzo, y ha estado concentrado varias semanas en tierras costasoleñas.

Ayer se pudo ver en el Ciudad de Málaga a mitos del equipo ¬–pese a que haga poco tiempo de su retirada– como Shevchenko y Rebrov, el actual entrenador. No jugó el exmalaguista Antunes, que saludó a sus excompañeros, y también hubo otros reencuentros, como los de los croatas Vida y Cop o los paraguayos González y Santa Cruz.

Tantos tempraneros

El partido sirvió para que Horta se reivindicara. Lo hizo con dos goles en el primer cuarto de hora. El primero fue con apenas 29 segundos transcurridos. Pablo leyó su movimiento de desmarque ante una zaga que achicaba espacios de forma desordenada, y el luso irrumpió solo ante Shovkovsky. Luego, recibió de Duda y, desde el vértice del área, se buscó posición de tiro y anotó de bello lanzamiento con rosca.

Horta jugó por la izquierda, y Mastour por la derecha, con Duda muy activo por dentro.

Si en el primer tiempo se pudo ver al central del filial Calero, en el segundo salió su compañero de zaga Luis y los medios centro Deco y Cassano. Con un armazón central de Tercera, el Málaga gozó de menos posesión (a Uche casi ni se le vio), pero no sufrió ante un rival plagado de internacionales. El Dinamo le puso poca garra al asunto, y acabó sin inquietar a Ochoa. Una derrota más que merecida.