Eliseu tiene un objetivo: retirarse en el Málaga. Así se lo ha expresado en los últimos meses a sus numerosos amigos en el club, desde sus compañeros a los empleados, sin olvidar a los propios dirigentes del club. Más allá de que su pobre temporada tampoco le ha permitido contar con ofertas interesantes, el portugués no contemplaba marcharse. «No me quiero mover de aquí», ha comentado durante esta temporada. Y se siente feliz, porque da por hecho que continuará otras tres temporadas más, hasta finales de junio de 2017.
«Eliseu cumple su sueño de regresar al Málaga por la puerta grande». Ese fue el titular de SUR el 3 de julio de 2010. No hizo falta mucha presión por parte del presidente, Fernando Sanz, y del entrenador, Juan Ramón Muñiz, para convencerlo entre mayo y junio de ese año para que retornara al conjunto blanquiazul. Un año antes había sido traspasado al Lazio italiano y la experiencia fue pésima para él y para su familia. Solo jugó cuatro partidos oficiales antes de aceptar una propuesta del Zaragoza para jugar la segunda vuelta como cedido.
Eliseu no entiende el fútbol sin estar en el Málaga, y a estas alturas tampoco se entiende al Málaga sin Eliseu en sus filas. La pasada temporada vibró como un niño, como cualquier aficionado, con el paso por la Champions, competición en la que además fue el máximo goleador blanquiazul. Dejó para el recuerdo dos goles en Bruselas ante el Anderlecht y otro en San Siro frente al Milan. Su contrato expira en cuarenta días, así que en el arranque de este ejercicio ambas partes se pusieron manos a la obra para la renovación, aunque muy pronto quedó patente que las distancias eran insalvables.
La elevada ficha de Eliseu era un lastre para el Málaga –y así se le hizo saber–, aunque paralelamente el rendimiento del portugués no ha sido brillante esta temporada. Bien es cierto que siempre ha gozado de la confianza de Bernd Schuster, pero el sobrepeso del portugués se ha dejado notar en no pocos encuentros. Aun así, es un futbolista muy querido en el vestuario. Y qué decir entre los aficionados.
Retorno de Husillos
El retorno de Mario Armando Husillos a la dirección deportiva a finales de diciembre allanó el camino por la cercana relación entre él y Eliseu. El mensaje del hispanoargentino desde el primer día fue claro: «Piensa solo en jugar, ya hablaremos». Sabía que en cuanto se sentara con el portugués todo iba a ir sobre ruedas y que la negociación se desbloquearía. Desde el principio la negociación fue encaminada a una renovación a la baja, algo que el portugués no aceptó de buen grado. Sin embargo, con el paso de las semanas comprobó que no le quedaba otro camino. Es más, en los últimos tiempos el jugador recibió un claro mensaje del club: «Tranquilo, que si no tienes ofertas, nosotros no vamos a dejarte tirado».
Eliseu cumplirá 31 años el próximo 1 de octubre, así que, de firmar por tres temporadas más, acabaría su nuevo contrato ya cercano a los 34. Por eso, da por hecho que se retiraría aquí. Si prolongara algo más su carrera, sería impensable no hacerlo con la camiseta malaguista.
En cualquier caso, conviene aclarar que, pese a que el jugador da por hecho que continuará tres temporadas más en el Málaga, todavía no se han sentado a ultimar la negociación los dirigentes del club y el representante del portugués. La visita de este último se espera en La Rosaleda para los próximos días, aunque la disposición de Eliseu ha sido clave para avanzar casi definitivamente cara a un acuerdo.
Eliseu ha disputado hasta el momento 214 partidos oficiales con el Málaga Club de Fútbol y ya es el noveno en la clasificación, mientras que en Primera lleva 152 con la camiseta blanquiazul y ocupa en la actualidad la decimocuarta plaza. De cumplirse lo que él les ha comentado a sus más cercanos en el vestuario, tendrá a tiro colocarse entre los mejores de la historia.