Javier Tebas pocas veces pasa inadvertido. El presidente de la Liga de Fútbol Profesional es muy crítico en sus análisis, lo que muchas veces tiene consecuencias. Pretende hacer muchos cambios en este organismo que agrupa a los clubes de fútbol y, sobre todo, se ha centrado en la gestión económica de los equipos, que es desastrosa en muchos casos. Y en los últimos días ha tenido un protagonismo especial para los malaguistas al hablar otra vez de una forma negativa del jeque propietario del club, Abdullah Al-Thani. Sus últimas palabras, pronunciadas en Valencia molestaron a los aficionados del conjunto blanquiazul y también al propio club. De ahí que este periódico contactara ayer con Tebas para preguntarle el porqué de esta actitud. Pero el máximo dirigente de la Liga fue contundente al explicar que se malinterpretaron sus comentarios y que no se refería a Al-Thani cuando hablaba de ‘frikis’ ni tampoco quiso faltarle el respeto. «Soy partidario de la inversión extranjera seria, pero que no se le dé cancha a gente que quiere meter dinero cuando se ve que no es cierto que vaya a hacerlo. Pero yo no he criticado al jeque, sino el concepto inicial de la inversión, que se realizó de una forma desmedida por parte de su entorno. Y luego ha tenido las consecuencias de un acondicionamiento muy drástico y duro. He alabado en muchas ocasiones a Shatat, Casado y Novo, porque han sido capaces de sacar adelante en poco tiempo el proyecto. Y a estos señores también los ha puesto el jeque. Nunca se me ocurriría criticar al jeque, y mucho menos la del Málaga, al que siempre que puedo le echo una mano, a veces importante», declaró con convicción.
El presidente de la Liga explicó a SUR que no puede elogiar circunstancias concretas que a él le parecen negativas, pero que eso no supone ninguna desconsideración hacia nadie. «Lo que pasa es que yo tengo que destacar los momentos malos de los clubes para que no se repitan en otro sitio. Y en el Málaga se vivió una gran ilusión, pero es verdad que si aquello se hubiera racionalizado mucho mejor quizás se habría mantenido la misma ilusión, pero es posible que luego nunca le hubiera llegado el agua al cuello al club, como ocurrió hace dos años», destacó, a la vez que insistió en la faceta más positiva del propietario del club de Martiricos: «De verdad que no le tengo ninguna manía al jeque, y mucho menos al Málaga, todo lo contrario. Al revés, gracias al dinero del jeque tuvimos un equipo de Champions que casi llega a semifinales. Para España era muy importante. Nosotros hemos visto que es verdad que se ha gastado ese dinero, los 150 millones. Lo tenemos contrastado, porque hemos analizado el club de arriba a abajo. Por eso también le tenemos que estar agradecidos todos».
Indicó que las críticas a la gestión en algún momento del Málaga solo es un pequeño detalle en relación a la apuesta y la inversión del jeque, y puso como ejemplo al nuevo dueño que llega al Valencia: «De Peter Lim hay que esperar y tener paciencia para ver qué pasa. Pero he dicho que ese modelo no me gusta, porque no me gusta que en los clubes endeudados su dueño sea también el propietario del fondo de inversión que pone a los jugadores. ¿Por qué?, porque vacía patrimonialmente al club. Mañana se marcha y se lleva a los jugadores y la deuda sigue siendo del club. Cosa que no ha pasado en el Málaga. Por eso mantengo que, pese a que creo en los fondos, si alguien quiere ser el dueño de jugadores con un fondo, ese equipo tiene que tener poca deuda. De lo contrario, no podría hacerlo».
También se refirió en la conversación con SUR a la primera vez que el jeque se mostró molesto, que fue al observar que su equipo era de los que menos percibía de la televisión pese a disponer de una plantilla estelar. «La Liga no reparte dinero de la televisión, sino que los clubes lo negocian individualmente. El Málaga partió de una base negativa, ya que venía de Segunda y de un proceso concursal años atrás. Lo que no podía pretender el jeque era que todo cambiara de la noche a la mañana por haber hecho esos fichajes. Pero luego, con sus éxitos deportivos, consiguió elevar la cifra inicial hasta los 24 actuales. Es normal, pero en su momento. No se puede cambiar todo tan rápido», insistió Tebas.
Obligado a advertir
El dirigente quiso justificar también que su labor no es representativa ni tampoco tiene una dependencia absoluta de los equipos. «El presidente no es empleado de los clubes, sino de la Liga. Pero es que yo tengo también que criticar a los presidentes de clubes de fútbol. Hay 42 y, si alguien lo hace mal, ¿qué hago, me callo? Mi obligación es advertir a quien no esté haciéndolo correctamente. Lo que yo critiqué del Málaga fue esa época cuando dejó de invertir el jeque. Ahí tuvimos que intervenir antes de que se vendiera a Cazorla y Rondón. Pero lo defendí con la sanción y al jeque le agradezco que invirtiera ese volumen de dinero, pero a lo mejor, y digo a lo mejor, se podía haber hecho casi lo mismo consolidando el potencial del club», subrayó.
Tebas, por tercera vez en la entrevista de ayer, volvió a transmitir un mensaje inequívoco a favor del propietario del club. «No tengo nada contra el Málaga ni contra el jeque, ni mucho menos. Hablé de la situación de vacío en su momento, pero halago la actual, el camino escogido ahora, que también es gracias al jeque. Ha sabido confiar en unas personas y estar encima de ellas para llevar a buen puerto la gestión del club. Él es responsable de esto», aseguró, mientras que dejó la puerta abierta a que el club venda a algún futbolista para alcanzar el saneamiento lo antes posible: «El Málaga, como otros equipos, engordó mucho y ahora tiene que adelgazar para ponerse en su peso, y eso no se puede realizar de golpe. Se está haciendo de una forma rápida, pero tendrá que vender jugadores. Tiene que ponerse al día. Es el club que menos está tardando en sanearse. Al Málaga lo he puesto de ejemplo positivo en muchas ocasiones por todo esto. He hablado muchas veces bien que mal. Es la verdad. Lo están haciendo muy bien, con Shatat y los demás».